18 de noviembre de 2006

Nicolás Bujes - Tesis Finalizada ¿Que sentido tiene el estar acompañado?"

Esta pregunta me la he formulado seriamente hace mucho tiempo, en un período donde me daba cuenta que las personas no son perfectas y siempre tienen algo de malo.
Si, es cierto que me apartaba de la gente por las recurrentes desilusiones que me otorgaba mi círculo social y también debo admitir que quizás haya sido muy exigente con todos los que están en él. Juntando estas dos cosas me hicieron susceptible a la mayor de las desconfianzas, por lo que me dediqué a analizar seriamente si una vida sería realizable sin ningún lazo afectivo que me ate a ciertos riesgos, los cuales no quería tomar.
Al ser niño todavía no me daba cuenta de que realmente el cambio que me proponía en hacer era drástico, tanto para mi como para mi familia y seres queridos.
Realmente creo en el respeto de puntos de vista y siempre me ha fascinado la idea de que alguien quiera estar fuera de toda comunidad y vivir su vida felizmente sólo, honestamente y no sólo para llamar la atención.
Esto marcó un punto importante en mi vida, porque aprendí a identificar a las personas que se aíslan porque quieren llamar la atención o conseguir algo, de las que realmente quieren estar solas porque no se sienten cómodas en el ambiente en que están y deciden ser consecuentes con su condición y marcharse. Esto definitivamente me hizo limitar mis posibles amistades, puesto que no aceptaba a las personas del primer grupo.
Mas adelante, pude darle una diferencia al acto del suicidio, puesto que el que vive solo no rechaza su vida ni la denigra, sino que llega a un acuerdo con el ambiente en que está, sabiendo que si se queda en el mismo sitio pondrá en riesgo a los demás, puesto que lo reprimido siempre explota en algún momento, esto siempre respetando el regalo de la vida.
Después de pensar en el aislamiento físico que puede hacerse a si mismo una persona me puse a pensar que quizás no era necesario, es decir que también uno se puede aislar mentalmente de todos los que lo rodean y seguir viviendo su vida feliz.
Pero, ¿será cierto esto?¿ Será capaz alguien de aislarse de todo lazo social afectivo y seguir viviendo normalmente? (BuenPlanteamiento)
Me parece que esto es comparable con alguna enfermedad, como por ejemplo el autismo, sin embargo, el autismo no es una decisión que haya tomado el individuo.
Uno no le puede preguntar a un niño autista si es feliz en su mundo, quizás si quizás no.
Pero si es feliz y puede conectarse con Dios en su mundo ¿qué sentido tiene estar acompañado? ¿Es necesario tener a alguien al lado a quien contar nuestros secretos, tener amistad? ¿El hombre es realmente un ser social?

TESIS (6 pags)
¿Qué sentido tiene el ser sociable?

¿Qué sentido tiene el ser sociable?Este problema filosófico ha sido parte de mi existencia de hace muchos años, siendo la pregunta original la de ¿por qué necesito a otro? Muchos factores influyeron en mí para tener tal cuestión en mi mente, ya sea, egoísmo, frustración en las relaciones, alta autoestima, etc. Sin embargo, más allá de las intenciones personales de cada individuo para llegar a semejante pregunta, nos encontramos con una discusión filosófica que nos invita a por lo menos dar el intento de encontrar una respuesta que nos complazca a todos.El concepto de sociabilidad se define como la «calidad de sociable» y sociable (del latín sociabilis) es el individuo «naturalmente inclinado a la sociedad o que tiene disposición para ella». El ser sociable es aquél que tiene la capacidad de relacionarse con sus semejantes en los espacios sociales. El concepto de sociabilidad ha sido abarcado por los distintos pensadores de la historia universal de distintas y múltiples maneras. Aquí algunos de los ejemplos mas demostrativos.De parte de Aristóteles (384 a.C. – 322 a.C.), de quien hemos estudiado su teoría del conocer, entendemos la sociabilidad como la esencia de la naturaleza humana, junto a la racionalidad.“…El que sea incapaz de entrar en esta participación común, o que, a causa de su propia suficiencia, no necesite de ella, no es más parte de la ciudad, sino que es una bestia o un dios". (Política, libro 1,1).Con esta cita, entendemos que Aristóteles considera al individuo humano como alguien que por naturaleza necesita arbitrariamente a los otros para subsistir. Con esto, Aristóteles explicaría que la organización en sociedad (Estado) del ser humano es totalmente natural y ese es el único camino que el ser humano podría aspirar.Por otra parte, encontramos la doctrina social que plantea, dotado de naturaleza social, el hombre vino a parar en la Tierra para formar sociedad bajo la autoridad de Dios, donde podrá desarrollar todas sus capacidades. “El hombre está naturalmente ordenado a vivir en comunidad política, porque no pudiendo en la soledad procurarse todo aquello que la necesidad y el decoro de la vida corporal exigen como tampoco lo conducente a la perfección de su ingenio y de su alma, ha sido providencia de Dios que haya nacido dispuesto al trato y sociedad con sus semejantes, ya doméstica, ya civil, la cual es la única que puede proporcionar lo que basta a la perfección de la vida” (León XIII, Inmortali Dei, 4)La versión cristiana de la sociabilidad se orienta al sentido de solidaridad altruista, basada en los principios supremos de la caridad y del amor al prójimo, superando su sentido utilitario.Considerando las anteriores definiciones de sociabilidad, encontramos explícito el supuesto de que el hombre está destinado natural y arbitrariamente a formar sociedad, debido a que es totalmente no autosuficiente en orden para subsistir. Sin embargo también hay autores que agregan nuevos elementos a la indudable, hasta ahora, característica social del ser humano.Emmanuel Kant (1724 – 1804) en sus escritos políticos (Ideas para una historia universal en clave cosmopolita, 1784) nos habla en su Cuarto principio del Antagonismo en la dimensión humana. Kant reafirma que en el ser humano hay una tendencia a priori de estar en sociedad, sin embargo, le agrega un elemento nuevo, que es el de la tendencia a disociar dicha sociedad. Esta dualidad es explicada de modo que si el estar en sociedad el hombre siente el desarrollo de sus condiciones naturales (se siente “mas hombre”). Sin embargo, al enfrentar los deseos individuales del ser humano contra la sociedad, encuentra una resistencia que hace automáticamente que el mismo hombre sea propenso a tener esta misma resistencia hacia los demás, es decir, se aísla. Este estado de aislamiento, para Kant, tiene una connotación positiva, puesto que es en él donde el hombre despierta todo su potencial y se autocorrige buscando el reconocimiento de sus semejantes. Este reconocimiento será, para Kant, el ansía de honores, poder o bienes.Otros pensadores, como Nicolás Maquiavelo, le agregan al concepto de sociabilidad el motivo único de la subsistencia. Este autor, enfatiza el carácter maligno del ser humano, considerándolo perverso por naturaleza. La sociabilidad, es para él y muchos, el medio de obtención de recursos para satisfacer únicamente al individuo.Con la última visión podemos apreciar una instrumentalización de la sociabilidad, es decir, no es la sociabilidad sobre el ser humano, sino el ser humano como ser maligno que esta sobre la sociabilidad.Estas distintas concepciones del término sociabilidad, nos hacen dar cuenta de que varía mucho su significado según la postura que uno elija tomar. Sin embargo, para seguir en el desarrollo de esta Tesis y no caer en ambigüedades, dejaremos como válida, para efectos del presente trabajo, una definición neutra del término sociabilidad. Es decir, la asociaremos con la tendencia involuntaria del ser humano, que tiene para hacer grupos de convivencia. Es decir, no generalizaremos el que ser sociable pertenezca a todo ser humano, sino que sólo la desarrollaremos como una tendencia. A modo de ejemplo podemos poner el caso de los tréboles, los cuales tienen una tendencia a ser de tres hojas, sin embargo, eso no hace menos válida la existencia de tréboles con cuatro.Con esta definición le hemos quitado el valor de característica ontológica a la sociabilidad y para fundar este hecho debemos primero tener claro los conceptos que se asocian a la ontología (Bien). La ontología se define como la rama de la metafísica que estudia la naturaleza de la existencia de los entes, para luego definirlos. Ésta empieza cuando el hombre comienza a necesitar explicaciones racionales y no mitológicas de los fenómenos físicos del mundo, el origen de las cosas, además de la creciente tendencia, durante la historia del ser humano a crear leyes o normas que se deban aplicar a todos los fenómenos, esto será denominado como filosofía. Se denomina la teoría del ser, o sea, el estudio de todo lo que es. Propone categorías y relaciones básicas del ser.(Ciktar fuente bibliográfica) Las entidades comprenden los objetos, las personas, los conceptos, las ideas, las cosas, y todo algo de lo que se puede cuestionar su existencia. La ontología está estrechamente ligada al estudio de Dios, en cuanto es el Ser Supremo, por lo que no podemos separar ambas ideas (ontología y Dios). A grandes rasgos podemos separar dos aspectos de la Ontología. El primero se refiere en cuanto ontología se refiere a la capacidad de la inteligencia humana para encontrar al verdadero sentido del ser (esencia). El Segundo aspecto se asocia al hecho de que el ser llega al verdadero saber (logos) y se expresa por medio de palabras (explicación). Esta Doctrina no quiere decir que el pensamiento humano crea en la verdad del ser, sino que la encuentra inscrita en lo que es y entonces lo manifiesta.Después de haber definido la Ontología como una ciencia que estudia al ser en cuanto ser, podemos embarcarnos a entender el porqué de hacer un fundamento ontológico del hombre. Muchos pensadores se han preguntado si es que los hombres comparten características comunes en cuanto ser, es decir, si hay elementos universales que sean aplicables a todo ser humano habido y por haber. Es claro que el ser tiene características, por lo que de éstas se pueden deducir o sacar a la luz principios del ser. Estos principios son absolutos, necesarios y universales. Dentro de estas características y principios no hay ninguno que explicite la sociabilidad del ser. (Revisar supuestos) Siendo mas claro, la conclusión que nos da la lectura del fundamento ontológico del hombre es que el ser no puede no ser y que tiene bondad. El ser solo se puede comparar consigo mismo y hay una multiplicidad de seres cada uno idéntico a sí mismo. El punto más polémico del fundamento es la sexta característica del ser humano, pues dice que todo ser es amable o bueno por naturaleza. (¿Quién lo dice? ¿Cu´çal es su fuindamento? ¿Revisaste autores más contemporáneos? Hoyt esta caracterización no tiene gran aceptación) Este es el punto donde nos quedaremos y será de relevancia en este trabajo pues es la característica del ser humano que mas se acerca a la sociabilidad humana. Tenemos una dualidad presente en la idea de que el ser es bueno amable según: El ser es conveniente a sí mismo, porque siendo idéntico a si mismo, no puede no ser, el ser es bueno pues es conveniente para si mismo, a su apetito de ser. Por otro lado, el ser es conveniente a otro, porque en cuanto ser, presenta algo que corresponde al apetito de otro, ya que el apetito es una carencia de algo, por tanto este ser, conviene al apetito de otros. Para que haya libertad en el hombre es necesario e indispensable que el ser, en cuanto ser, sea bueno. Por ejemplo si nos ponen a escoger, entre una manzana, y un libro ninguno de esos dos seres, ejerce influencia alguna sobre nuestra voluntad, es decir que tiene una bondad limitada, y nuestra voluntad tiene que ser ilimitada.Este punto se presta mucho para confusión, por lo que es preciso aclarar que cuando hablamos de ‘’bueno, y de amable’’ decimos que se trate del ser, de la naturaleza interior(¿Tiene sentido hablar así del ser humano? No analizas un objeto material cn "adentro" y "afuera", salvo que hables de la corporalidad) , de la esencia misma de la vida, no del hombre dentro de su conducta humana.Al leer este punto, podemos notar dos aspectos claves que sin duda nos llevarán a nuevas preguntas. Primero se habla de que el ser es bueno para sí mismo, y luego se menciona que puede también ser bueno con otro, siendo estos dos puntos separados y no necesariamente ligados. Entonces, ¿qué es lo válido? Si el ser ya puede ser bueno consigo mismo, ¿por qué será necesario que sea bueno con otro? El estar en sociedad no está explícito en el fundamento ontológico del hombre como pensaría Aristóteles o la doctrina cristiana. ¿De dónde vendrá entonces nuestra sociabilidad? Este es un tema en discusión que ha planteado tanto la antropología como la psicología. Psicólogos como Salomón Asch y Otto Klineberg, defienden la inexistencia de un impulso de sociabilidad en la conformación biológica de la especie humana, y propone más bien, la existencia de un interés social de los hombres por estar en consonancia con los otros.Ambos plantean que la sociabilidad no viene junto al ser humano, con pruebas como que el ser humano no ha desarrollado ningún órgano específico para la sociabilidad, sin embargo, Klineberg acepta que el repentino cambio de contexto de un individuo acostumbrado a estar en sociedad a un ambiente solitario da como resultado nefastos resultados. Sin embargo, por cuanto mas se investigue y se de prueba de uno o de lo otro, no se ha constituido hasta el día de hoy una ley que sea universal.Para continuar sobre este tema sacaremos algunas ideas del texto “El Hombre y la Gente” de José Ortega y Gasset. Específicamente en este texto se pueden extraer ideas con las cuales me apego. Primero que todo, se empieza con la idea de que hasta el momento de que llega el “otro” u “otros” todo en el mundo interior está calmado, sin molestias ni inconvenientes. Sin embargo, la aparición de personajes ajenos nos hace automáticamente estar alerta y con cautela. ¿Por qué? Se explica en el texto con un pensamiento del autor Nietzsche, donde nos deja claro que estamos tranquilos con la naturaleza (soledad) debido a que ella no tiene una opinión de nosotros, en cambio, mis semejantes, al tener mis mismas características, si poseen entendimiento y, por ende, una opinión del mundo y probablemente, de mí. Es decir, nosotros, como individuos nos podemos sentir dueños del mundo. Sí somos dueños y amos de nuestro mundo, que para cada uno comenzó como total y absoluto, sin embargo hay algo que me delimita. Esto es otro reino, otro ser como yo que también tiene mundo y lo crea a su antojo. Entonces, podemos deducir por el texto que la sociabilidad es a causa de un accidente que nos favorece, puesto que es una de dos, es decir, somos sociables o nos matamos el uno al otro. No podemos afirmar que todo humano tenga de por si sociabilidad, sin embargo, podemos asegurar que debido a la interacción con otros es posible desarrollar esta capacidad de relacionarse con sus semejantes. Aristóteles no quiso aceptar la idea de un ser humano autosuficiente, sin embargo, su tesis se desmorona cada vez que hay un ermitaño nuevo en el mundo, ejemplos que sobran. Se ha comprobado que el ser humano se puede abastecer de manera individual, sin la necesidad de otro que lo acompañe, por lo que, irrefutablemente la sociabilidad no es una característica natural del ser humano. Por otra parte, en el ejemplo de la doctrina cristiana, también se hace alusión de que Dios hizo al hombre social para que viviera en comunidad, sin embargo, bastaría con un solo individuo que no creyera en Dios y su misión social para destruir como arbitraria el aspecto social del humano según la Iglesia.Ya en este punto podemos encontrar una diferencia fundamental entre dos conceptos muy diferentes: sociabilidad y socialización. En primer lugar, la sociabilidad es una capacidad del ser humano que es a posteriori, es decir, se da después de la integración de la experiencia, uno debe aprender a ser sociable y también la sociabilidad es el medio que hace posible la vida en sociedad, al mismo tiempo, que la sociedad hace posible la sociabilidad entre sus individuos. Estas conclusiones nos brindan las bases para diferenciar a la sociabilidad de la socialización. Esta última es entendida como un proceso mediante el cual la persona (individuo) adquiere los hábitos sociales propios de su cultura. (Revisar... la experiencia humana es experiencia en el lenguaje, y el lenguaje es eminentemente social)
Consecuencias en el ser humanoLa no aptitud para sociabilizar puede conllevar una serie de consecuencias en el ser humano, lo que ha hecho que rasgos de la soledad, sea, en los últimos años, considerada como un problema clínico que requiere de una terapia específica.Desde la soledad, pueden generarse muchos otros problemas serios de estabilidad mental, tales como depresión, tendencias suicidas y también daños físicos como problemas cardiovasculares. En orden para detectar efectivamente síntomas de soledad, ésta ha sido definida psicológicamente como la ausencia, real o percibida, de relaciones satisfactorias, que se presenta con trastornos psicológicos y desadaptación, como ansiedad, depresión, insomnio, abuso de drogas y alcoholismo. Sufren de soledad los individuos que tiene carencia de: una persona cariñosa de quien depender, alguien que lo atienda, oportunidad de expresar sentimientos íntimos a otra persona, un grupo de amigos del cual sentirse parte, alguien que necesite de su amor, alguien que lo desee físicamente, personas con quienes compartir valores e intereses, amigos para compartir actividades recreativas, relaciones en el trabajo, un sentido de confianza en los amigos íntimos, intimidad física en forma regular. etc.Es importante destacar que existe la soledad crónica en aquellas personas que no han sido capaces de establecer relaciones satisfactorias por un período de varios años y por lo menos a través de dos etapas de su vida, como podrían ser la adolescencia y la adultez joven; o la adultez joven y la edad madura. También existe la soledad temporal, que incluye un estado de ánimo breve y ocasional de soledad, por ejemplo después del trabajo, o durante los fines de semana.La llamada “peste del siglo XX”, ha sido estudiada y es reconocida como un problema grave entre los países occidentales. En éstos, se ha implementado un sistema telefónico denominado “Teléfono de la Esperanza”, donde cualquier persona que tenga problemas de cualquier índole puede llamar y relatar su historia y quejas. Dejando registros de las 300.000 llamadas anuales hechas a esta asociación, el 100% presenta indicios de desórdenes psicológicos debido a un aislamiento emocional y físico de los individuos hacia la sociedad. El 70% de las llamadas hechas al Teléfono de la Esperanza son hechas por mujeres, sin embargo, esto no necesariamente significa que el hombre no tenga de igual manera tendencia a la soledad, sino que éste simplemente no habla de su interioridad. Un tema de actualidad que se pudo evidenciar en las llamadas son el aumento de relaciones cibernéticas que ha habido en este último tiempo como resultado de nuevas tecnologías. Podemos afirmar que en nuestros días resulta mas fácil estar sentado en frente de una pantalla que tratando de socializar en un ambiente externo donde nuestra imagen corre el riesgo de ser dañada directamente. (Abandonas la perspectiva antropológica para hacer un análisis psico-social)
Como podemos ver, nuestra sociedad tecnologizada ha ido cada vez separándose mas debido a que las relaciones y el contacto entre personas se debe hacer mas rápido y eficiente en pro de las necesidades laborales o individuales. Hemos dicho que el contacto entre personas se ha hecho mucho mas fácil, es decir, se ha hecho un cambio en la estructura de la comunicación del ser humano. Ahora, por ejemplo, no tenemos que necesariamente ir de viaje a visitar familiares, sino que con un simple email y una foto se pueden suplir los protocolos sociales instaurados en cualquier institución, ya sea familia, trabajo, etc. Con la llegada de los celulares podemos contactar a alguien dónde esté sin mayores problemas, lo que nos entrega su compañía, o por lo menos su acompañamiento por audio a no mas de apretar un par de botones. Cada vez es más cómodo para el ser humano actual encontrar una razón para no socializar por gusto, es decir, hacer amigos desinteresadamente, ya que nos encerramos en nuestras funciones y velamos por nuestra propia seguridad y prosperidad. Lo que nos entrega la tecnología es una manera de instrumentalizar la sociabilidad, algo parecido al pensamiento de Maquiavelo, ya que utilizaríamos el celular como busca de algo objetivo que nos sirva individualmente, buscando siempre el beneficio personal sin dar nada a cambio. Es fácil tildar de innecesario el hacer amigos o simplemente salir de nuestras casas a hablar con un conocido, ya que tenemos los medios para hacerlo sin movernos ni un centímetro. Actuamos como baterías, maquinas que aunque estén unidas y busquen el mismo objetivo (progresar) no pueden conocerse a sí mismos ni a otros. El 35% de la población entre 25 y 40 años vive sola en España y se ha mostrado la misma tendencia en la mayoría de los países occidentales. ¿Cómo se puede explicar eso si es que las comunicaciones están tan avanzadas y nos ha quitado miles pesos encima?
Lo lógico que habría de esperar cuando se facilita algo como tecnología para comunicar, es que las comunicaciones mejoren y así el ser humano pueda ser cada vez más sociable. Esto no es así, de hecho ha ocurrido todo lo contrario. El hombre contemporáneo se ha atrofiado socialmente debido al acomodamiento excesivo que ha hecho la tecnología para comunicarse. Actuamos con la lógica de la conveniencia, ¿qué es mas conveniente: quedarme en mi casa chateando sin peligros, o que vaya a la esquina a arriesgarme a ser maltratado por la gente? No es casualidad que fenómenos como el MSN atraigan cada vez mas, a personas de todo el mundo, dejándolos absortos al frente de la pantalla cómodos configurando la estructura de sus amigos, ahora denominados contactos.
El 26% de los americanos se califica de solitarios crónicos. El 54% de los franceses afirma haber sufrido de soledad alguna vez. El 25% de los españoles dice sentirse solo con frecuencia, el 40% confiesa no tener ningún amigo íntimo y el 20% declara haber tenido problemas de depresión. (citar fuentes)
Según todas las consecuencias vistas anteriormente, ¿podremos justificar cuando se habla de nuestros tiempos como un período de deshumanización? Personalmente creo que hay dos hipótesis para este fenómeno de nuestro tiempo. La primera se basa en que la sociedad finalmente se ha dado cuenta que las relaciones sociales con lazos afectivas no son precisamente necesarias para el beneficio y desarrollo para las personas. De esta manera, se intenta hallar la tecnología necesaria para individualizar más a los sujetos dentro de la sociedad, para que tengan una mejor concentración en sus quehaceres y así puedan cumplir sus deseos y alcancen la plenitud. La competencia representa un beneficio para la comunidad ya que así el nivel de exigencia se va haciendo cada vez mayor, mejorando nuestro nivel de vida.
La segunda hipótesis supone que el ser humano ha cometido el grave error de dejar su interioridad de lado, con la cual no podrá realizarse plenamente y será afectado de diversas enfermedades tanto psicológicas como físicas. La deshumanización será valida para esta hipótesis, ya que, en el trasfondo de está esta inscrito el que la sociabilidad es un aspecto que nos hace humanos. La sociabilidad sería entonces una característica ontológica del ser humano, la cual se está atrofiando en esta sociedad que sólo apunta al bienestar personal y no al comunitario.
Esta ambivalencia nos contradice y nos obliga a analizar punto por punto los pros y los contras de ambas situaciones. Si bien por un lado la humanidad deja de sociabilizar, es mas eficiente, sin embargo, al hacer esto, la sociedad se infecta de enfermedades antes desconocidas, tales como los trastornos mentales y enfermedades fisiológicas. Por otro lado, se podría vivir en un mundo mas sociable, sin embargo, no tendría tantas aspiraciones a desarrollarse plenamente, puesto que las relaciones afectivas son muy inestables.
Es en este punto donde queremos analizar el porqué de que, si bien partimos con el supuesto de que somos seres sociables, individuos que admiten ser sociables eligen estar aislados de la comunidad a que pertenecen.
Algunas de las teorías para explicar la soledad las aportó Weiss en 1973. Bryan Weiss, médico y psiquiatra estaunidense, plantea que existen dos tipos de soledad: la soledad emocional y la social. La primera consiste en una falta de una relación intensa o relativamente perdurable con otra persona (por ejemplo individuos recientemente divorciados, personas viudas, etc.), estas relaciones pueden ser de tipo amorosas o relaciones personales que generen sentimientos de afecto y seguridad. Por otra parte, la denominada soledad social involucra el no pertenecer a un grupo o red social. Estas pueden ser un grupo de amigos quienes participan juntos en actividades sociales o cualquier grupo que proporcione un sentido de pertenencia basado en el compartir preocupaciones, trabajo y otra actividad. El concepto de redes sociales se define como aquellas personas que son significativas en la vida del individuo y con quienes él interactúa regularmente. Weiss, además creía firmemente en que la soledad mucho tenía que ver con el vacío o déficit emocional que se pierde cuando una relación o mas se terminan. A esto le llamó: la provisión social. Así mismo, él desarrollo 6 distintas provisiones sociales de las cuales dos abarcan el tema de la soledad:
La provisión de acercamiento, proporcionada por relaciones en las cuales las personas reciben una sensación de satisfacción y seguridad. Se vincula con la soledad emocional.
· La provisión de integración social, proporcionada por una red de relaciones en la cuales el individuo comparte intereses y preocupaciones. Se vincula con la soledad social.
Weiss, aunque no habla sobre si el ser humano nace siendo sociable o no, pudo distinguir entre dos perspectivas del porqué ocurre la soledad. Una es meramente dependiente de la situación (pérdida de un ser querido, fracasos, etc.) y la otra es debido al carácter o forma de ser del individuo (introvertido, tímido, etc.).
Por otro lado, los psicólogos Peplau y Perlman definen soledad como una respuesta a la discrepancia entre las relaciones interpersonales deseadas y las existentes. Estos autores también señalan características esenciales de la soledad, las cuales son:
1. es el resultado de deficiencias en las relaciones sociales
2. representa una experiencia subjetiva (que no necesariamente es sinónimo de aislamiento social, ya que uno puede estar solo sin sentirse solitario o sentirse solo cuando uno esta en grupo)
3. es desagradable y emocionalmente angustiante
Otras investigaciones de los mismos señalan que la soledad puede asociarse fácilmente y ser tomada como equivalente a estados de depresión u otra situación negativa para el individuo. También delimitaron otras causas para la soledad. Una puede ser de orden cuantitativa, es decir, sin muchas personas en sus redes sociales (amigos) o cualitativa, lo que se refiere a la falta de cercanía e intimidad con personas de su alrededor.
Para ambas teorías Weiss y Peplau-Perlman, se explica de forma semejante el porqué de que la sociedad humana tiene en sí individuos que tratan de alejarse de ella. Si rebuscamos en la investigación, podríamos aventurarnos a deducir de que todos estos resultados fueron extraídos por gente que considera que la sociabilidad es necesariamente un aspecto humano, ya que ellos investigan las causas de porqué la gente se separa no mencionando nunca los beneficios de la soledad. Personalmente, sería muy válido el primero investigar el porqué nos hemos de juntar en comunidades, puesto que aunque parezca obvio, es un tema que no es fácil de explicar.
Es fácil aceptar que las primeras poblaciones del hombre en la tierra fueran sólo por conveniencia, o mejor dicho, para lograr la sobrevivencia, sin embargo, hay un paso gigantesco en la historia del hombre, que es cuando empieza expresar su interioridad, es decir, crea el lenguaje. Es en este momento cuando quizás el hombre trazó su destino, ya que, al tener lenguaje (una forma de expresión) no puede olvidarla, es decir, uno que ya una vez logró sacar un aspecto de interioridad hacia el mundo exterior, nunca se le olvidará. Esto se debe a que, al expresarse el individuo con algo o alguien, éste se conecta con el mundo y lo lleva a un estado superior que no puede ser olvidado.
Si afirmo que desde el punto que el hombre creó el lenguaje, punto que debió ser cuando los hombres de Cromañón, sustituyen a la cultura de los Hombres de Neandertal (creemos), ya que es ahí donde se encuentra el gran salto cualitativo que hizo capaz al hombre antecesor para crear el lenguaje y así su condena a buscar medios de sociabilizar. Si afirmamos eso, tendríamos que por consecuencia, que decir que el hombre por naturaleza no es un ser sociable, ya que esto sólo depende de manera que se le integre a éste el lenguaje, aspecto que debe aprender mediante el modelamiento a tempranas edades. Mi resultado es fundado por hechos ya que si analizamos en el desarrollo de la tesis y nos situamos en el ejemplo de los extraños casos de los "niños salvajes" que fueron reportados en Europa desde el siglo XVIII, podemos deducir que como si bien estos niños no fueron educados nunca por sus padres u otras personas, sólo responderían a adaptarse a su medioambiente externo, el cual era los bosques de Europa. Esto nos muestra una prueba clara de cómo el lenguaje tiene un rol protagónico en la hora de decidir si el ser humano es un ser sociable o no. Pablo Quinteros habla sobre que el lenguaje se desarrolla de la mano con las capacidades sociables, pero que la sociabilidad puede existir sin el lenguaje. Yo discuto este punto debido a que si bien puede haber sociabilidad sin lenguaje, deberíamos estar hablando a la sociabilidad asemejada a la de los animales, la cual es mero producto de la obtención de recursos mediante ayuda mutua en orden para conseguir la sobrevivencia. Yo diferencio de esas sociabilidades y distingo la humana de la animal, ya que esta última tiene de por sí fines que no tienen nada que ver con lo productivo, sino con los subjetivos deseos que tienen los seres relacionados. (Muy bien) A esto, Pablo alude al acto de modelamiento que se hace para aprender el lenguaje ya que sin interacción entre el que no sabe lenguaje y el que sí, para Pablo ya es un acto de sociabilidad. Aquí también rebato este punto debido que creo que es sobrevalorada esta interacción que no necesariamente debe ser de tipo social, ya que si una conducta aislada fue la que desencadenó el aprendizaje del lenguaje, no quiere decir necesariamente que el ser que aprendió este nuevo aspecto fue siempre sociable. Por ejemplo, el zorro, animal solitario, no por observar a una ave ni caminar al lado de ella quiere decir que ya es un ser sociable.
Es así como podemos relacionar mi conclusión del tema con la llamada peste del siglo XX, ya que esta representa la perdición que tiene el ser humano que por alguna situación o desadaptación, se ve en un dilema que más de alguna vez alguno de nosotros ha estado. Cuando rechazamos al mundo por enojo o decepción, nos vienen malestares inmensos y viene la angustia. Es así como podemos revalorar los diagnósticos tan pesimistas de la soledad dictadas por Weiss y Peplau-Perlman, cuales tomaban a la soledad como un estado total y absolutamente desagradable que debía de ser tratado clínicamente. El problema que se esta realmente viendo es el conflicto entre dos intenciones internas del organismo. Por un lado esta el enojo hacia el mundo, las razones del porque conviene estar solo alejado de todo riesgo de ser rechazado y dañado por otros. Mientras que en contraparte se encuentra el deseo de expresarse que nos ha inculcado el aprendizaje del lenguaje, desde cuando éramos niños. Este conflicto mental afecta directamente al organismo físico lo que repercute y en síntomas de problemas cardiovasculares sin mencionar los trastornos psicológicos que también pueden llegar a provocar, tales como tendencias suicidas, esquizofrenia, etc. (Abandonas las conclusiones personales... Finalmente ¿es lo mismol "sociabilidad" que estar ontológicamente determinado por el "otro"?)

1 comentario:

Unknown dijo...

Carlos Chandía:

Nico acabo de leer algo reinteresante de Sto tomas, donde habla sobre el espiritu y como este forma las relaciones sociales... si te interesa dejame una respuesta en mi tesis (un si nada mas) y te la mando al correo... eso

Abrazos