18 de noviembre de 2006

Ignacio Cano - Tesis Finalizada: De la importancia de la existencia divina en la vida humana.


Ignacio Cano

3ºC

De la imporancia de la existencia divina en la vida humana...


Introducción
Muchas personas se han preguntado a lo largo de la historia acerca de una de las más tratadas problemáticas filosóficas, el sentido de la vida, y gente de muchos ámbitos y realidades ha intentado responderla, ya sea por la religión, por la ciencia, por el futuro de la raza humana y sus innumerables posibilidades, han intentado complejizar la pregunta, o simplificarla, se han preguntado si dios existe o no, se han preguntado que hay después de la muerte, se han preguntado cual es el propósito de nuestra existencia acá. Yo también me lo he preguntado, una y otra vez, pero he descubierto que muchas de estas preguntas no me duelen demasiado. La gente se pregunta si dios existe o no, la respuesta, si es que llegara alguna vez a encontrarse realmente, cambiaria el mundo para bien o para mal, es mas, sabemos que la sola idea de cualquiera de estas posibilidades a causado guerras y otras catástrofes, pero hasta entonces me he preguntado yo mas frecuentemente, ¿nos sirve de algo que exista o no lo haga?, o mas bien pues estoy sonando muy pragmático, ¿cual es la importancia para la vida humana, vida entendida como el paso de nuestro nacimiento a nuestra muerte, de la existencia divina?, asimismo con la muerte, ¿tiene alguna importancia lo que pase después de esta, en este momento?. Y finalmente, ¿tiene algún sentido hacer algo en nuestras vidas, en mi vida?
A lo largo de este escrito trabajare con la primera de estas incógnitas, pues es algo que me ha aproblemado durante algún tiempo, y que además tiene importante incidencia en las otras dos preguntas. Sea como concluya esto, será un importante camino con respecto a la respuesta de estas y otras preguntas.
Es importante que desde ya deje claro que aunque no comparto las ideas cristianas en muchos aspectos, intentare que lo que escriba sea lo mas objetivo posible en cuanto a este aspecto (tomando también en cuenta que esto es realmente imposible), y así como te juro lector que lo intente, te ruego a ti también que dejes tus prejuicios aparte al leer este humilde escrito mío, que si bien ya no se puede decir que salio de mi pluma, por lo menos puedo decir que salio de mi cabeza.
También me disculpo si algunas ideas están presentadas de forma algo caótica y sin conexión con las anteriores, puesto que en varias ocasiones las ideas me surgieron como chispazos y sentí la necesidad de incluirlas de alguna forma.

Tesis:


Dios:
Primero que nada supongo que debería explicar que es lo que entiendo como “dios”, pero la verdad es que no lo entiendo, pero la verdad es que nadie realmente lo hace, es verdad que usamos el concepto, lo que debería implicar que le damos un significado, pero los conceptos que usamos se quedan cortos al intentar explicar a este ser, mas aun cuando las posibles respuestas son tan variadas y cambiantes, pero por lo menos podemos decir que a lo largo del tiempo se le han dado numerosas propiedades: Creador de todo, motor universal, primer movimiento, poseedor del plan de la existencia, conocedor del futuro, ser infinito, padre misericordioso, el todo y la nada, por solo dar algunas, y no es extraño, ya que esta idea, la idea de algo inmensamente superior a nosotros, nos ha acompañado desde nuestros inicios, en un principio era simplemente una herramienta ocupada para explicar lo que no entendíamos, la lluvia y el fuego eran obra divina, pero después ha ido evolucionando, llevándonos a pensar en lo que pasa antes y después de que vivamos, si es posible que nuestra vida tenga algún sentido, y aun podríamos decir que lo ocupamos para entender cosas mas allá de nosotros, pero ya no es necesario para entender lo inmediato, podemos vivir toda nuestra vida, desde el útero a la tumba, sin siquiera preguntarnos porque estamos acá, gracias a la bendita ciencia creemos saber porque cae la lluvia y porque se producen los terremotos, y eso parece bastarle sino la mayoría, a una buena parte de nosotros. Dios sigue presente, pero realmente a dejado de afectar nuestras vidas inmediatas, mas allá de lo que pase después, queremos saber lo que pasa ahora, el problema que debemos resolver antes de si dios existe o no, es si nos afecta en algo cualquiera de estas dos opciones, el creyente se debe preguntar ¿Seria lo mismo el mundo si dios no existiera?, el ateo se debe preguntar ¿Seria igual todo si de hecho existiera?


¿Qué hace dios?
La forma mas simple para ver la importancia de dios en la existencia humana seria por supuesto ver como las personas han reclamado a lo largo del tiempo lo que ha hecho la mano de este ser en sus vidas. Por ejemplo muchas veces la gente reclama que ha sido tocada por Dios, que ha ocurrido un milagro en su vida, gracias a su fe o a pesar de ella(famosas son las millares de conversiones por milagros) y no estoy en posición de juzgar su credibilidad, no tengo la menor idea de si estos milagros son reales o imaginarios, lo que si me cuestiono es si es que es posible que vengan de este ser infinito, es decir, si seguirían ocurriendo estos milagros de no existir este dios(pero con las personas aun creyendo en su existencia)
También encontramos los libros sagrados por supuesto, que nos hablan de como dios supuestamente se ha relacionado con las personas a través de la historia, hermosos o terribles relatos, que hablan de creaciones y de asesinatos, pero realmente no nos hablan de dios, sino de como sus autores lo veían, esta claro que el Coran habla de forma bastante diferente de dios que la Biblia, y aun dentro de estos existe este problema, de hecho es mas que posible que Moisés y Jesús no hablaran del mismo dios, después de todo hablan de forma bastante diferente de este, de hecho podemos observar que pasa lo mismo con todos los religiosos que no sean meras ovejas, dogmáticos seguidores de otros, raza que ojala este cercana a la extinción, cada uno tiene su propia visión de dios y de como este afecta nuestras vidas, algunos podrían decir que esto es independiente a dios, que si existen diferentes visiones no es debido a que dios cambie, sino a que no somos capaces de comprenderlo. Bueno esto por lo tanto invalidaría los textos “sagrados” como tales, pero los convertiría en relatos humanos, algo aun mas importante según mi punto de vista.
Estos son solo algunos ejemplos de como la idea de dios actúa en la vida común y volveré a esto mas tarde


¿Dios existe?
Una curiosa cosa que ha ocurrido es que algunas personas han intentado demostrar la existencia de dios lógicamente, un ejemplo de esto es Tomas de Aquino, quien en su obra "Summa Theologica" entiende a dios por 5 vías, las cuales son tomadas de otros autores(como Aristóteles y otros), y retomadas después por otros mas y explicare estas brevemente:
-Vía del primer motor: explica que existiendo el movimiento en el mundo solo como consecuencia de un movimiento anterior, debe existir un primer ser que mueve sin ser movido, siendo este dios.
-Vía de la causa eficiente: dice que toda efecto tiene una causa y que algo no puede ser causa de si mismo, por lo tanto debe haber una primera causa, dios
-Vía del ser necesario: dice que todo ser contingente (que puede ser y no ser) tiene su base en algo necesario, y que no se puede proceder infinitamente en esto así que debe existir un ser que sea necesario por si mismo, dios.
-Vía de los grados de perfección: dice que existiendo la diferencia entre mas y menos, y entendiéndose el mas como la cercanía con lo máximo, debe existir un ser máximo según el cual lo demás es medido, este ser, por supuesto, seria dios.
-Vía del ser inteligente y del gobierno del mundo: que dice básicamente que todo tiene razón de ser, y que para que exista algo tan complejo y "perfecto" como es el mundo debe existir algo que lo haya planificado, siendo este dios.

Otro autor que intento probar la existencia divina mediante la lógica fue Anselmo de Canterbury quien expuso un argumento bastante conocido:
-Todo ser humano puede pensar en un ser mas perfecto que cualquier otro que pueda ser pensado, la existencia es un grado de perfección, el ser que existe es mas perfecto que aquel que solo es pensado
Al observar estos argumentos al instante nos asaltan dudas, aun a simple vista podemos ver que para aceptarlos debemos también aceptar una cantidad de supuestos, y esto ya ha sido criticado desde Kant, pero aun así puede que sean ciertos, puede que dios exista y que pueda ser comprobado por alguno de estos caminos, ¿pero de todas formas, con que quedaríamos?
Un ser inteligente, que existe, que nos creo, que es causa de todo, que tiene todo planeado y que es mas perfecto que todo, ¿y que?
El dios que nos han mostrado estos argumentos es un dios del pasado, un dios que hizo grandes cosas, pero que no necesariamente puede hacerlas ahora, un dios existente, pero impotente. Hay religiones que han seguido este camino, las llamadas deístas, pero en nuestra cultura lo predominante es el teísmo, y este clásicamente le ha dado ciertas características a dios.


¿Que características tiene Dios?
Clásicamente se le han dado cuatro características a este dios teísta, que incluyen:
-omnipotencia: se refiere a que dios puede hacerlo todo
-omnisciencia: se refiere a que dios lo sabe todo, independiente del tiempo (puesto que es un ser atemporal)
-omnipresencia: habla de que dios se encuentra en todo, hay algunas visiones que lo llevan mas lejos diciendo que dios lo es todo (panteísmo)
-omnibenevolencia: se refiere a que dios es absolutamente bueno y justo
También estas clasificaciones nos llevan a problemas puesto que si dios sabe todo, la existencia humana carecería de sentido, ya que todo ya estaría previsto y la idea de pecado no podría ser aplicada, ya que implica la decisión conciente de ir contra los deseos de dios, imposible si es que ya este planeado que el pecado sea cometido.
De la omnibenevolencia nos surge el problema de que es lo bueno y lo justo, es según los estándares humanos o por otros que no podemos comprender, ¿son acaso los estándares de los que habla Tomas de Aquino en sus grados de perfección?, ¿siguen estos siendo los mismos a lo largo del tiempo?, ¿son estos los mismos para cada cultura o, mas aun, para cada persona?
La omnipotencia nos lleva a un problema parecido al primero, ya que si dios puede interferir en las vidas de los hombres y doblegar sus voluntades, no queda mucho entre lo que elegir, ya que dios puede interferir a su gusto, sin que nosotros nos enteremos siquiera, sumando esto a la benevolencia divina aparece el problema de sus milagros(los mencionados anteriormente), los que aparentemente solo afectan a algunos, si admitimos estas características divinas o bien aceptamos que dios pudiendo hacerlo todo no hace nada, pues siendo bueno respeta la libertad del humano, o si lo hace e interfiere en las vidas humanas, pero si es así, debería interferir en todas.
La omnipresencia por otro lado no plantea problemas con respecto el asunto de la tesis, ya que si tomamos a dios como un todo entonces existe necesariamente e interfiere en el mundo, o no existe y tampoco interfiere.
Tomando esto en cuenta vemos que de las cuatro clásicas características divinas, mas de alguna ocasiona problemas dejándonos básicamente como opciones la predestinación, es decir negamos la libertad del hombre y su capacidad creativa, o la visión del existencialismo, la existencia antes de la esencia, es decir, el ser humano al encontrarse en este mundo sin un sentido definido, va creando su propia esencia, con un dios ausente o inexistente.


Nuestro creyente
Si se ve de esta forma quedamos con que este clásico dios no puede ser aceptado, pues este es un dios dogmático, un dios que nos deja muchas dudas y que ni los creyentes pueden llegar a creer totalmente, el religioso de nuestra época va por otro lado.
Generalmente el creyente actual (el independiente, no el "oveja") habla de dios de forma bastante diferente a la vista anteriormente (deberían estos textos de hecho venir con una advertencia: "estos argumentos tienen algunos miles de años y no corresponden a nuestra realidad actual") puesto que nuestro creyente es mas libre, el choque entre el pensamiento mítico y dogmático antiguo, que tenia al hombre atrapado en una cosmovisión que suponía tener todas las respuestas, y el pensamiento escéptico moderno, de quienes encontraron esto insuficiente, pero terminaron encontrando todo insuficiente, ha producido al pensador critico.
Nietzsche pensaba que esto mataría al creyente, decía que al no poder seguir sosteniéndose de su cosmovisión rígida ("La muerte de Dios") se encontraría desolado (y esto es cierto, ¡de hecho ahora esa desolación llega a ser parte de nuestra adolescencia!) y que desesperaría al no encontrar de que agarrarse, sostenía que el fin de esta caída se encuentra en la creación de nuevos valores, de nuevas ideas, de nuevos asideros por así decirlo.
"Nuestro creyente", a pesar de lo dicho por Nietzsche, sigue vivo, pero ya no se encuentra en su cosmovisión cómoda, dogmática y rígida, sino en la búsqueda de una visión personal de dios o si lo extendemos a "nuestra persona", la búsqueda personal de la verdad.
Algunos han encontrado cierta clase de respuestas que los satisfacen en cierta medida (y a nadie mas que a ellos mismos), por ejemplo al preguntarle a mi amigo Ignacio Bombal que pensaba él sobre el tema y me dijo: "Dios en nosotros, hace que nos pongamos desafíos, para ser mas santos", otro podría decir, "Dios es el sentido de la vida" u otras sentencias similares, pero nadie llega a una respuesta concluyente, universal.

¿Y la respuesta concluyente?
Creo que la tal respuesta universal, este fin ultimo, esta solución concluyente simplemente no existe, pero esta respuesta es simplemente inaceptable para el hombre común, debido a esto es que se puede vivir sin preguntarse nada que le mueva el piso, siguen construyendo aun cuando los demás les muestran las fisuras de sus edificios, este hombre común es tanto el dogmático religioso como el científico empedernido o incluso el filosofo que se dedica a desarrollar las ideas de una corriente especifica, por suerte no es la única clase de hombre que existe, para explicarlo mejor diré que la vida del hombre contemporáneo se ha convertido en una caída libre desde un infinitamente alto precipicio, un salto a un pozo sin fondo.
Durante nuestra niñez nos educan dentro de cierta cosmovisión que, siendo niños, aceptamos totalmente, pero durante la adolescencia comúnmente comenzamos a preguntarnos acerca de tal cosmovisión, encontramos aspectos que no nos satisfacen, hay cierta clase de hombre, el del párrafo anterior, que cierra los ojos ante estos errores y sigue construyendo sobre piso inseguro, pero hay otro grupo que termina diciendo: -"esta respuesta no me convence, tengo que encontrar una nueva", este grupo de hombres rompe su piso en lo que Nietzsche llamaría negación de los valores vigentes, "su muerte de dios", y salta hacia este precipicio o pozo, pero aun dentro de este grupo se encuentran diversas clases de hombres.
Existe una segunda clase de hombre, el escéptico, quien al ver que su visión de la niñez no lo satisfacía asume que ninguna lo hará, este hombre cae con los ojos cerrados esperando que todo termine rápido, afirmando que la caída es un mero paso entre el salto y el suelo, no encontrándole sentido a nada.
Encontramos también un tercer tipo de hombre, el neodogmatico, este es el hombre que al ver que lo que entendía como mundo se ha derrumbado intenta a toda costa encontrar un nuevo asidero, nuevos dogmas a los que atenerse, una cómoda nueva forma de entender la realidad que le entregue otro, algunos encuentran su asidero en la ciencia, en alguna religión nueva o en algún tipo de corriente filosófica y suelen intentar agarrarse firmemente a esta nueva realidad, usualmente sucede una de estas dos cosas, el hombre cierra los ojos y se aferra a su nueva visión del mundo, sin intentar cuestionarla para no volver a sentir el desamparo de la caída anterior, o la explora a fondo, buscando sus grietas y descubriendo que, tarde o temprano, terminaremos por romper nuevamente nuestro asidero y buscar uno nuevo, entre estos existe una curiosa clase, quien va constantemente pasando de una visión a otra y afirmándola firmemente ante los demás, siempre creyendo que ha encontrado la solución definitiva a sus preguntas, al mes siguiente lo vemos devoto a una nueva realidad.
Existe también un cuarto tipo de hombre, nuestra “persona”, que durante la caída no se intenta agarrar a cualquier idea otorgada por otros, sino que crea las propias, elige sus propios valores, y construye sus propios asideros, este hombre es un ser individual, es el hombre que Nietzsche ,al igual que muchos otros, estima, y aquí deberíamos detenernos, para explicar mejor a este cuarto hombre, clase a la que pertenecería nuestro pensador critico, y últimamente "nuestro creyente" , pero antes quiero introducir una idea para mas adelante, la idea de que este cuarto hombre no ha llegado a la plenitud del pensamiento, sino que aun esta estancado de cierta forma, por lo que aun es necesaria una quinta clase de hombre.

Apología del Dogmático
Quiero hacer un paréntesis antes de seguir con el tema, y es para explicar y de cierta manera intentar justificar la visión del dogmático y del neodogmatico, el mundo en que vivimos actualmente es aterrador, y como dije antes no es necesario preguntarse cosas para avanzar en el, es mas, aun cuando las personas con ideas nuevas e innovadoras puedan llegar a ser admirados y reconocidos lo cierto es que el poder es mantenido por dogmáticos, es cosa de ver las altas esferas económicas o políticas e incluso llegando a las artísticas.
Cuando uno empieza a hacerse preguntas siente miedo, desamparo y especialmente soledad, y la lucha contra la soledad es una de las mas importantes para el hombre desde hace mucho tiempo, no por nada lo han bautizado como “animal social”, y es exactamente la soledad lo que se vence con el dogmatismo.
También existe otro miedo profundo, la idea de la incertidumbre, del poco conocimiento que tiene realmente el hombre, basta ver que el único avance real que hemos obtenido en esta materia es pasar del “Solo se que nada se” de Sócrates al “Pienso, luego existo” de Descartes, logrando simplemente descubrir que existo (ni siquiera la existencia de los demás esta demostrada) y mas aun cuando este “cogito, ergo sum” cartesiano ni siquiera es aceptado por todos. Por esto el dogmático se queda con su primera visión del mundo, por esto el neodogmatico busca desesperadamente una que le satisfaga, y por esto es que hasta cierto punto, podemos comprender al rebaño.
Y es del rebaño de donde se levanta la voz de: -La filosofía no sirve para nada
Y lo dicen en el sentido de que no les otorga respuesta alguna, puesto que al fin y al cabo la filosofía es el arte de destruir amablemente toda seguridad, por ello es que cada filosofo comienza su carrera cuestionando las ideas de sus antecesores, por eso es que Sócrates es tan recordado, aun cuando no escribió un solo libro que halla llegado a nuestras manos.


El cuarto hombre
Ahora si siguiendo con el tema podemos profundizar en la mente de este pensador intrigante, el cuarto hombre, aquel que es capaz de aceptar la soledad y crear sus propios asideros, normalmente interpreta las ideas o pensamientos de otros, pero según su propia visión, sin aceptar la respuesta de ningún otro como propia, puesto que este hombre ha logrado descubrir que realmente ninguna respuesta sirve para todo el mundo. La autentica verdad solo puede llegar a ser conocida mediante la individualidad del pensamiento.
Puesto que qué es la verdad, sino una creencia tan fuertemente arraigada en el espíritu y en el pensamiento que no puede ser cuestionada sino con un enorme esfuerzo, y que quien es capaz de plantar esa verdad en nosotros sino nosotros mismos, esta es principalmente la diferencia entre el dogmático y el libre pensador, el primero ha sido convencido de seguir un camino trazado por otros y mediante esfuerzo logra no cuestionarse sus ideas, el pensador libre ha trazado su propio camino y fin, por lo que su verdad es parte de si mismo. Así profundizando en nuestro creyente vemos que ya no es el miembro del rebaño que ha aceptado el destino que le han otorgado sus lideres, que ha aceptado un dios que realmente no puede aceptar, sino que es un hombre parte dios, pues su verdad, su idea de divinidad no nace de otro lugar que de su propio interior.

Así pues vemos que el pensamiento crítico ha matado a la religión, no al religioso y que toda idea es capaz de subsistir y evolucionar si es que realmente existen individuos que la hagan subsistir y evolucionar para si mismos.
Muchos podrían pensar que este ser individual capaz de crear su propio sentido de vida y trazar su propia ruta hacia este es el estado culmine del ser humano, pero vemos que si seguimos escarbando todavía estas respuestas personales, aun cuando sean tomadas como verdades y estén firmemente arraigadas en la persona, no satisfacen completamente a sus creadores y es que aunque concientemente deseemos tener una respuesta a nuestras preguntas (y que concientemente supongamos que esta respuesta existe), profundo dentro de nuestros seres existe un amor hacia lo desconocido, y es que mas que la verdad, necesitamos al constante camino hacia ella. Y el hombre que ha visto esto es el que llamare el quinto hombre.



El quinto hombre
Este es el hombre que mientras cae observa a los demás tratando de salvarse y se ríe de ellos, pero también ve al escéptico con los ojos cerrados y se compadece de el, este hombre generalmente nace de un pensador critico que no logro darse una respuesta satisfactoria, este hombre cae y aprende de lo que ve durante su caída y mas aun, lo disfruta, este hombre sabe que probablemente no encontrara una respuesta pero sigue buscando sin esperanzas por el puro placer de buscar, tal como lo presenta Unamuno en “Mi religión” cuando dice: “Y me pasaré la vida luchando con el misterio y aun sin esperanza de penetrarlo, porque esa lucha es mi alimento y es mi consuelo. Sí, mi consuelo. Me he acostumbrado a sacar esperanza de la desesperación misma. Y no griten ¡Paradoja! los mentecatos y los superficiales”.
Puesto que la caída es vida y avance, esta puede tener un fin o no, pero realmente no importa puesto que el camino es lo que hace crecer al hombre, no su destino, finalmente descubrimos que talvez Maquiavelo estaba mal después de todo con su famosa sentencia de “El fin justifica los medios”, y no, tengo la convicción de que los medios son los que justifican al fin.
Y así como dije anteriormente que la verdad era verdaderamente, valga la redundancia, una creencia profunda manifestada plenamente en el libre pensador, digo ahora que la verdad para este quinto hombre es una verdad que puede existir o no hacerlo (dependiendo de la persona) pero que es independiente del camino que se tome para alcanzarla, aun así existe la verdad del libre pensador en el quinto hombre, y se manifiesta en los caminos que toma, pero en esta nueva clase de hombre ya no es una creencia firmemente arraigada al espíritu, sino una convicción, una idea que no es realmente falsable, puesto que no es propiamente una idea, es mas bien el bosquejo de una que nunca llegara a serlo, un fuego interior que es casi imposible de modificar. Tal convicción puede ser por ejemplo el amor a la libertad, o la confianza en un “algo” mayor que nosotros, tal convicción no puede ser llamada creencia, pero tal vez si fe, esperanza, o tal vez algún neologismo con el cual a alguien se le ocurra bautizarlo.

La verdad
Vemos que ni para unos ni para otros existen verdades universales, pero también vemos que eso no las invalida, dos verdades totalmente opuestas pueden coexistir en dos personas diferentes y no por eso ser mas importante una que otra, o bien ambas son de suma importancia para el desarrollo del espíritu humano o si lo miramos de otro lado ambas carecen de igual importancia.
Vemos que esta verdad que para el cuarto hombre representaba el fin de sus acciones, su sentido o destino, para el quinto hombre es mas una noción de dirección, una constante del espíritu que intenta justificar mediante sus acciones, esto hombre no camina hacia ningún objetivo especifico, pero tampoco vaga sin cierto orden, este orden es el dictado por su propio espíritu, así los valores no son para ganarse el cielo, sino para contentar este fuego interno.

Siendo esto así vemos que el creyente que llega a estos pensamientos llega a la verdad de la “existencia” de dios, volviéndose este una creación de convicción y no un ser independiente de nosotros (y realmente no estamos seguros de que nada sea fuera de nosotros), el dios personal es parte del creyente y es lo que determina las decisiones de este.

Dios de la religión contra dios personal
Con esto observamos que el dios de la religión ya no puede ser aceptado, así como la deidad fue cambiada por el dios antiguamente, este antiguo dios suponía una existencia independiente del hombre, suponía un ser supremo incapaz de una real conexión con el humano, este dios como vimos anteriormente nos dejaba oscilando entre un destino rígido sin libertad y una falta de sentido total para la vida, ambas existencias terribles de imaginar.
Este dios es cambiado por este nuevo dios personal, independiente de la religión pero dependiente del hombre, tan dependiente de este que llega a no existir si el hombre no lo hace, puesto que si ya no existieran los hombres, ¿quien entendería a dios como nosotros?, y mas aun, dependiente ya no del hombre sino del individuo, quien mediante sus elecciones y el regocijo del camino va creando su propio destino, y en esto estoy con mi compañero Felipe Jara quien en su tesis dice: “cada hombre es dueño de su propio destino”, y que forma mas elevada de poseer el control del propio destino que poseyendo la libertad de no poseer ningún destino en particular, y mas aun poseer una visión propia y cambiante del mundo y de dios.
El dios personal no implica necesariamente la creencia en un ser superior, puesto que corresponde a los valores máximos y naturales del individuo particular y es en definitiva algo prácticamente innato en el hombre y que por lo tanto no podemos decir con toda propiedad lo que afirman algunos de que “dios es una creación humana”, pero para la persona que si cree en un ser superior, este dios personal se vuelve este, y se vuelve verdad.
El dios personal esta relacionado con nuestras experiencias, nuestras decisiones y nuestras expectativas y es últimamente, lo que queramos que sea.

Concluyendo:
Vemos entonces que este dios de la religión, este dios adaptado para las masas de personas sin tiempo de preguntarse acerca del mundo es realmente innecesario, contingente, este dios que nos intenta demostrar lógicamente Tomas y muchos otros, este dios, dios de la religión realmente no importa demasiado su existencia, seria igual el mundo si estuvieran en lo cierto o no.
Pero este dios personal, este dios presente en cada uno si es importante, esta convicción que caprichosamente e deificado es realmente la esencia del hombre, puesto que lo importante del hombre no es tanto su razón sino que, en mi humilde opinión, su espíritu, su capacidad para llegar a dar la vida, luchar con la desesperación, convertirse en un paria para la sociedad, con el único propósito de no abandonar ideas que no tiene forma de comprobar, pero que siente con todo su ser, el hombre que no ha sentido esto alguna vez, simplemente no ha llegado realmente a ser hombre. Y en los tiempos actuales, donde el embotamiento mental predomina, cada vez son más necesarios estos hombres capaces de abandonarlo todo, por amor a algo que desconocen, después de todo… “sum quia absurdum

Finalizo con una última cita a Unamuno, también de su texto “Mi religión”:
“Y bien, se me dirá, "¿Cuál es tu religión?" Y yo responderé: mi religión es buscar la verdad en la vida y la vida en la verdad, aun a sabiendas de que no he de encontrarlas mientras viva; mi religión es luchar incesante e incansablemente con el misterio; mi religión es luchar con Dios desde el romper del alba hasta el caer de la noche, como dicen que con Él luchó Jacob. No puedo transigir con aquello del Inconocible —o Incognoscible, como escriben los pedantes— ni con aquello otro de "de aquí no pasarás". Rechazo el eterno ignorabimus. Y en todo caso, quiero trepar a lo inaccesible.”





Notas extra:
Mientras estaba trabajando en mi tesis constantemente comenzaba a divagar y alejarme de la idea principal del texto (lo que de todas formas termine haciendo), hubo algunas cosas que escribí que por no venir al caso pero no querer perderlas las incluí acá al final.

Al fondo del precipicio
A lo largo de este ensayo e hablado de la vida del hombre actual como el salto desde un precipicio inmensamente alto, y el intento de explicar el mundo que nos rodea como un intento de salvarnos de la desesperación que nos provoca la caída, pero a la vez esta metáfora habla de la desesperación con la que nos aferramos a la vida, el miedo a la incertidumbre es en definitiva miedo a la muerte, pues la muerte es la mayor incertidumbre de todas, por lo que todo intento de explicar nuestras vidas, de encontrarles sentido, es con el afán de sentirnos tranquilos con respecto a la muerte.
La muerte es últimamente el momento en que esperamos se nos diga si estuvimos en lo correcto al actuar como actuamos, si finalmente nuestra vida esta justificada porque logramos un fin, llegamos a nuestro destino, pues yo les digo que no deberíamos en verdad, preocuparnos tanto de la muerte, como de la vida, y en ves de esperar a ver si nuestras vidas tuvieron sentido creémosle su justificación mientras andamos, no hablo tanto de la formula Horaciana del “carpe diem, quam minimum credula postero”(capturemos el día, puesto que el futuro es incierto), y aun menos con su equivalente en Epicuro: “comamos y bebamos que mañana moriremos”, puesto que pienso que el presente y el futuro están completamente en nuestras manos, mas aun, pienso que el hedonismo no es la mejor forma de aprovechar los días que tenemos en la Tierra, ya que el placer como forma de vida se vuelve efímero y no tan gratificante, en definitiva pienso que la mejor forma de ocupar nuestro tiempo es construyendo nuestros propios y nuevos caminos.


Del dios personal al dios religioso
Vemos últimamente en el génesis del dios personal el posible génesis de una religión o un culto, y en las despreciables ansias del neodogmatico de encontrar una respuesta otorgada por otro para sus propios problemas la construcción de las bases de esta, probablemente así es como nacieron muchas religiones, un grupo de hombres desesperados oyen el relato personal de alguien e intentan completarlo y aceptarlo, de esta forma toda religión es en naturaleza personal, y en actualidad dogmática. Así por ejemplo podríamos explicar el fenómeno presentado casi al principio de la tesis sobre el origen de los libros sagrados, donde se ve que cada autor presenta de manera personal su visión de dios, y el dogmático la adapta y recopila, y forma a partir de ello una religión, volviendo esta original visión del mundo en un esquema rígido que será implantado como cosmovisión a los niños hijos de tales dogmáticos, esquema ante el cual luego se revelaran creando un circulo vicioso de creación y destrucción de ideas.

Nociones de bibliografía:
Realmente no recuerdo demasiado la bibliografía que ocupe puesto que muchas veces cite con respecto a lo que sabia de antes y otras simplemente busque en Internet, la primera parte se la debo a
http://es.wikipedia.org/wiki/Dios (argumentos lógicos, características de dios)
Las ideas de Sartre y existencialismo y Nietzsche fueron recuerdos de lecturas pasadas, a Unamuno le debo por su texto “Mi religión” que se puede encontrar en http://www.ensayistas.org/antologia/XXE/unamuno/ y a su libro “El sentimiento trágico de la vida”
También le debo algo a las tesis de
-Felipe Jara, por inspirarme en sentido de la vida
-Raúl Montero, por inspirarme en predestinación
-Ismael Navarro, por recordarme que podía usar a Nietzsche
Y en especial a las paginas sagradas de Internet: Google y Wikipedia
;P

Terminado a las 3:22 AM del viernes 8/12

...Cualquier cosa reprochable se debe a la falta de sueño...

3 comentarios:

Teoría del Conocimiento dijo...

-Cual es tu mirada propia de la existencia de Dios, muestras mayormente que dicen otras personas.

-Podrías citar textos de la Biblia donde se puedas fundamentar la información que presentas de Dios.

Teoría del Conocimiento dijo...

Crítica de Felipe Jara

1.- ¿creeremos en Dios por temor a la muerte? La creencia en Dios puede deberse desde el principio de los tiempos al miedo a lo desconocido, a la muerte, y quizás es por eso que hemos elaborado distintas religiones para tratar de formar una fe que evite esa duda.
2.- ¿Para un creyente es Dios el sentido de la vida?
3.- ¿Qué pasa con el libre albedrío? ¿Si existe un Dios somos realmente libres o estamos a su disposición?

Teoría del Conocimiento dijo...

Diego Rojas. en cuentro interesante ti tesis aunque encuentro un poco complejo de entender las sitas a filosofos que haces alomejor falta un poco mas de desarrollo en eso y si hablas de un dios para un creyente de alguna religion o que es para un ateo o agnostoco como compruebas que es un solo ente el que creo el mu8ndo o nuestra vida y no son varios.....por otro lado para el catolico dios es infinitamente misericordioso apesar de nuestros problemas diarios y dolencias...trata de explicar eso q es interesante el por que...