5 de abril de 2013

Cuarto medio A - Recepción avances historia falaz

2 comentarios:

Bórquez – Cárcamo – Gacitúa - Vergara dijo...

Bórquez – Cárcamo – Gacitúa - Vergara

Título:””

Un día soleado, caminando por las calles de Nueva York, cercano a las oficinas de la ONU, se reconocen dos personas por sus rasgos similares, ambos coreanos, que se distinguen muy bien de los chinos, japoneses, y el resto de los asiáticos. Uno estaba vestido humildemente, con sus ropas, harapientas, demostraban su condición de campesino, mientras el otro como un americano cualquiera.
- ¡Hola, compatriota! – Dijo el de prendas occidentales
- ¡Saludos, camarada! Supe por tus rasgos que eres de Corea. Vamos a comer sushi y chapsui de perro.
- ¡¿Camarada?! Acaso eres un cochino norcoreano?
- Por supuesto, acaso aquí no se llaman así todos?
- Cómo se te ocurre semejante estupidez, perro norcoreano, el comunismo no existe fuera de Corea (Falacia Ad Hominem)
- ¡Como osas a decir tales palabras, maldita ramera consumista! Nuestro líder puede tiene más bombas que cualquiera, y los vamos a matar a todos, somos superiores y te arrepentirás por ello. (Falacia Ad baculum)
- Y que haces tú aquí, pobre campesino norcoreano?
- No lo sé, al que escribió esto no se le ocurrió pensar en algo, por lo que aparecí de la nada.
- Jaja, típico del norte de Pyongan…
- Pero eso no importa, porque nuestro líder dice que mientras creamos en el triunfaremos, pues ser comunista está de moda, y si él lo dice, es verdad. (Falacia ad verecundiam) Así que te han engañado.
- ¿Pero qué sabes tú? A ti siempre te han ocultado la verdad de todo,

Unknown dijo...

Montero - Casanova - Bobadilla - Aedo

Hace frio… me recuerda al invierno de mi hogar, mi madre echaba la leña al fuego, siempre estaba cansada porque trabajaba como china, después de todo, era una prostituta.

Tener una madre prostituta, no es cosa fácil, tienes que adaptarte a ser mal visto y ser el personaje principal de las burlas del colegio. Tuve la suerte de saber que mi madre era una “zorra” cuando ya era un adulto, pero desafortunadamente todos mis compañeros me hacían indirectas mientras yo no entendía cual era el fin de cada molestia, todos se habían acostado con ella, habían algunos que no me molestaban, ya que mi mama no les cobraba, para así, no tener que pasar un mal momento. Compadezco a mi madre, me escondía su trabajo, lo ocultaba. Cuando era niño pensaba que ella era una espía ya que todas las noches salía a “atrapar hombres”, pensaba que era una superheorina,